Militantes de izquierda y trabajadores se movilizaron hoy en el barrio porteño de Barracas para conmemorar el 15 aniversario del asesinato de Mariano Ferreyra, el joven dirigente del Partido Obrero (PO) baleado en 2010 por una patota de la Unión Ferroviaria. El acto central, en la esquina de Luján y Perdriel -lugar del crimen-, incluyó una radio abierta, marcha por las vías del Ferrocarril Roca y discursos contra la burocracia sindical y la precarización laboral, en un contexto de reformas impulsadas por el gobierno de Javier Milei.
La concentración, organizada por el PO y agrupaciones como el Polo Obrero, reunió a cientos desde el mediodía con banderas rojas, fotos de Ferreyra y cánticos como “Viva tu lucha obrera y socialista”. Oradores clave incluyeron a la diputada nacional Romina Del Plá (Frente de Izquierda-PO), quien vinculó el hecho a la “burocracia que hoy transa con Milei”, y al diputado bonaerense Pablo Giachello, que recordó el “ataque de la patota de José Pedraza”. También hablaron Edgardo Belliboni (Polo Obrero) y Jorge Hospital (Agrupación Ferroviaria Mariano Ferreyra), exigiendo expulsar a los “colaboracionistas sindicales”.
El crimen de Ferreyra, de 23 años, expuso alianzas entre sindicalistas peronistas, patronales y el Estado kirchnerista, que condenó a Pedraza a 15 años en 2014. Hoy, el homenaje resalta su vigencia ante paritarias congeladas y despidos masivos, con intervenciones como la de Alejandra Lipcovich (ATE Garrahan), que ligó el ajuste a “destrato en discapacidad y universidades”.