La Corte Suprema de Justicia se prepara para emitir un fallo decisivo en la causa Vialidad, que podría confirmar la condena a seis años de prisión contra Cristina Fernández de Kirchner por presunta administración fraudulenta en obras públicas durante su presidencia. Según fuentes judiciales, la resolución podría llegar antes del 19 de julio, fecha límite para oficializar las candidaturas legislativas en Buenos Aires, poniendo en riesgo los planes de la expresidenta de competir por una banca en la tercera sección electoral.
El tribunal, integrado por Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, desestimó recientemente los intentos de la defensa de Kirchner de apartar a Lorenzetti, argumentando que los planteos no tenían sustento legal. Esta decisión habilitó a la Corte a avanzar en la revisión del expediente, que podría ratificar la pena e inhabilitar de por vida a Kirchner para cargos públicos, bloqueando su participación electoral.
En un reciente acto en la sede del Partido Justicialista, por el Día de la Resistencia Peronista, Kirchner abordó la presión judicial y denunció una campaña en su contra. “Anunciamos una posible candidatura y se desató una furia judicial para proscribirme”, afirmó, acusando a la Corte de actuar como “un escudo de los poderosos, no como garante de la justicia”. En tono desafiante, agregó: “No hace falta que me metan presa para que el país esté peor; el problema no soy yo, es el modelo que están imponiendo”. También llamó a sus seguidores a mantenerse movilizados, asegurando: “Estaré donde tenga que estar, pero el pueblo siempre será mi lugar”.
El kirchnerismo, desde el Instituto Patria, ya organiza una respuesta ante un posible fallo adverso. Convocaron a intendentes, legisladores y movimientos sociales, advirtiendo que una condena sería un ataque a la democracia. “No van a solucionar nada condenándome; solo buscan disciplinar a los que piensan distinto”, expresó Kirchner en el mismo acto, reafirmando su postura combativa. En la Corte, sin embargo, las posiciones no son unánimes: Rosatti y Lorenzetti estarían inclinados a confirmar la sentencia, mientras que Rosenkrantz podría buscar un análisis más detenido, según trascendidos.
El fallo en la causa Vialidad no solo tiene implicaciones legales, sino también un fuerte impacto político. Una condena podría fracturar al peronismo en un momento clave, mientras intenta rearmarse frente al oficialismo libertario. Por otro lado, un retraso en la decisión podría interpretarse como una maniobra para mantener a Kirchner en el centro de la escena, alimentando la polarización política.
Con el reloj electoral corriendo, la tensión aumenta en Tribunales y en el ámbito político. La resolución de la Corte, esperada en las próximas semanas, definirá no solo el futuro de Cristina Kirchner, sino también el rumbo de la contienda legislativa y el escenario político argentino.