Rescataron los cuerpos de los andinistas que murieron congelados hace 25 años en un cerro mendocino

Una semana después de hallar los cuerpos congelados de dos andinistas desaparecidos en 1996, la Patrulla de Rescate de la Policía de Mendoza logró rescatar los cuerpos sin vida del cerro El Plata (5.956 metros de altura).

Se trata de Leroy Villa (21) y Nicolás Ibazeta (22), quienes ya fueron identificados por sus familias y habían desaparecido hace 25 años cuando intentaban ascender a la cumbre del cerro.

Según informó el diario local Los Andes, el operativo empezó el 26 de este mes con el traslado de 7 efectivos más la compañía del guía que había realizado el hallazgo hacía en campamento ubicado en Salto de Agua en Vallecitos.

Al día siguiente salieron hacia la cumbre del cerro para después bajar por el filo Suroeste hasta la zona donde se encontraban los cuerpos de los andinistas, según explicaron fuentes policiales.

Cuando llegaron al lugar señalado se realizaron las pericias sobre las personas y, conforme a las características del terreno, se tomó como la ruta de evacuación más conveniente.

«Luego de dos jornadas de muchos trabajo el 28 de abril a las 23, 14 efectivos llegaron a la zona de la Laguna del Platita con los cuerpos», informaron. En la mañana de este jueves el helicóptero policial realizó la evacuación de las personas hacia la ciudad de Mendoza.

El 18 de abril pasado el guía Juan Cruz Rodríguez subió al cerro por la pared Sur y en el filo suroeste a unos 900 metros de altura encontró dos cuerpos sin vida pero en buen estado de conservación.

Quiénes eran los andinistas y su historia

Leroy Villa y Nicolás Ibazeta desaparecieron en 1996 durante una travesía. Eran amigos. Ambos vivían en Uspallata. Se habían criado entre montañas. Como aficionados al andinismo, durante las temporadas de verano, trabajaban como porteadores (cargando equipamiento) de los escaladores que intentaban la cumbre del Aconcagua (6.962 metros de altura).

La historia de su desaparición en otoño de 1996 comenzó con la caída de un helicóptero de la Fuerza Aérea, presuntamente en la pared sur del Plata, una zona poca explorada, donde siempre persiste el hielo y nieve.

“Nicolás y Leroy habían salido a buscar el helicóptero, como tantos otros avistajes que hicimos esas semanas con nuestro grupo de montaña para colaborar con la búsqueda”, recordó el comisario retirado Antonio Ibaceta, quien era amigo personal de los dos jóvenes y aún está al frente de la Patrulla de Rescate y Auxilio de Montaña de la Policía de Mendoza.

Ambos habían egresado de la escuela secundaria combate de Potrerillos en Uspallata. Eran solteros y vivían con sus padres y hermanos.

Practicaban andinismo y participaban de distintos grupos de escaladores. Leroy trabajaba como porteador del Aconcagua con su hermano Hugo -quien ahora reside en Córdoba- y junto a Nicolás planeaban encontrar el helicóptero caído.

“Hicieron varias salidas, como muchos de nosotros, para avistar la nave siniestrada”, recuerda el ex comisario Ibaceta. Y con emoción relata: “Era mis amigos, dos personas saludables, deportistas que amaban la montaña”.

¿Cuánto tiempo se los buscó? Ibaceta recuerda que durante dos o tres temporadas de buen tiempo –entre primavera y otoño- salieron con sus otros amigos y la patrulla de rescate a buscar a sus compañeros desaparecidos.

La zona de búsqueda era muy compleja desde el punto vista técnico y las hipótesis eran que podían haber caído a una grieta o agarrado una avalancha de nieve y roca”, detalla.

Como la desaparición fue a pocas semanas del invierno, comenzaron los temporales de nieve y frío, y ya no pudieron ir a buscarlos. Volvieron a intentarlo al año siguiente y al otro, pero nunca los encontraron.

El retroceso de los glaciares por el cambio climático y las pocas nevadas de los últimos años, son algunos de los motivos por lo que han quedado expuestos los cuerpos y facilitó el hallazgo.

LM

Fuente: Clarin.com