En un duelo en el que unos y otros buscaron anticipar la jugada del otro, este lunes se terminó de fracturar la Confederación de Sindicatos del Transporte, la poderosa CATT, conocida como el brazo armado de la CGT debido a su poder de fuego. Cuando lograba encolumnar a todos sus gremios, paralizaba al transporte de todo el país.
Este lunes sucedieron en simultáneo dos hechos. Se juntaron miembros de la conducción de la CATT, donde manda sobre todo el camionero Pablo Moyano, y definieron correr del cargo al hasta ahora secretario general de la organización, el ferroviario Sergio Sasia. El líder de Unión Ferroviaria no se había plegado al paro del miércoles de la semana pasada de otros gremios del transporte contra la administración de Javier Milei.
Ya la semana pasada, Clarín habían anticipado que Sasia maduraba la idea de renunciar a la CATT. Sucedió exactamente este lunes, mientras sus ex colegas deliberaban sobre si lo echaban o no.
En su texto de renuncia, Sasia sostuvo: “He decidido presentar mi renuncia indeclinable al cargo de Secretario General de la C.A.T.T. con el que oportunamente me honraron mis compañeros y compañeras delegadas del Transporte en el Congreso Nacional de octubre de 2021, convocado para ello, a fin de facilitar la reorganización de la Entidad”
Y agrega: “Deseando que el alejamiento de mi cargo permita que se vuelva a trabajar en la búsqueda de la Unidad de Concepción deseada, seguiré conduciendo orgullosamente nuestra emblemática organización sindical, la Unión Ferroviaria, desde donde continuaré gestionando y trabajando en la senda de la solidaridad en el marco del Movimiento Obrero Organizado”.
Sasia además le tira un palo a sus rivales internos de la CATT: “Es importante destacar que, en los últimos meses vemos como algunas de las organizaciones sindicales de esta Confederación, han asumido una agenda de acción directa que se aleja no solo de las disposiciones orgánicas de la CGT, sino también de esta misma Confederación, en base a lo acordado en Consejo Directivo y Plenarios. En este marco han definido un plan de lucha que no fue dispuesto desde el seno de esta Confederación, ni de la propia CGT, no obstante, siempre hemos estado en permanente contacto con organizaciones hermanas”.