Unión de Santa Fe cumplió con su objetivo de permanecer en la Liga Profesional, al vencer este sábado a Tigre por 1 a 0, de local, en una dramática definición por evitar el descenso a la Primera Nacional, que finalmente se decidirá con un desempate entre Colón y Gimnasia y Esgrima La Plata.
El mediocampista Kevin Zenón, futbolista de la casa, convirtió de tiro libre a los 36 minutos de juego el gol que rescató al «Tatengue» del infierno después de comenzar la tarde en posición condenatoria.
Con los tres puntos sumados en el 15 de Abril, Unión llegó a 46 en la tabla anual y superó la línea de Colón y Gimnasia, que cayeron en sus visitas a Vélez Sarsfield y Banfield, respectivamente.
En un estadio repleto, el árbitro Yael Falcón Pérez pitó el inicio con hinchas que se comían las uñas de ansiedad y persignaban para invocar una ayuda divina en pos de la permanencia.
Unión asumió la obligación de ganar el partido con una formación integrada por tres delanteros, aunque uno de ellos, el juvenil Jerónimo Domina (18), se ubicó más retrasado sobre el banda derecha para colaborar con los mediocampistas.
La idea del «Kily» González fue poblar esa zona en busca de circuitos de juego para abastecer a los dos atacantes internos, el «Toro» Gonzalo Morales y Nicolás Orsini.
Frente a un rival sin objetivos, que todos sus movimientos los hacía con lentitud, Unión quedó atrapado en su propio nerviosismo y la mejor noticia que recibió en el inicio de la tarde fue la derrota parcial de Colón en Liniers.
Después de la media hora de juego, el local encontró la forma de llegar al arco de Santiago Rojas. Domina tuvo la primera ocasión a los 32 minutos con un remate defectuoso que el paraguayo devolvió con el pie.
La segunda oportunidad sobrevino con una pelota parada a los 36m. y provocó el desahogo del 15 de Abril con la excelsa pegada de Zenón. El zurdazo del mediocampista se estrelló en el palo derecho y la pelota cruzó la línea tras rebotar en el arquero.
Con la ventaja, Unión liberó tensiones y se hizo dueño del partido ante un Tigre sin ambición, que nunca representó una amenaza para Sebastián Moyano.
En el marco de un juego controlado, con la tranquilidad de los resultados externos, el «Tatengue» descansó con el manejo de los tiempos a cargo de Luna Diale y Zenón.
El «Kily» hizo cambios para asegurar el arco propio en la recta final del partido y el final provocó el delirio de los hinchas, que coparon el campo de juego para celebrar la permanencia.
Fuente: Télam