En plena disputa con la CGT, el Gobierno anunció la «libre elección de obras sociales»

El gobierno del presidente Javier Milei anunció este lunes la reglamentación del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 para posibilitarle a los trabajadores derivar sin restricciones sus aportes a la obra social o empresa de medicina prepaga que elijan desde el inicio de su contratación, una decisión que amenaza con tensar todavía más la relación de la Casa Rosada con la mayoría de los sindicatos nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT).

Luego de que se conociera que el Poder Ejecutivo se presentó ante la Corte Suprema de Justicia para intentar revertir, mediante un recurso extraordinario, el fallo que declaró inconstitucional y suspendió la aplicación del capítulo laboral del DNU 70/23, se conoció este lunes la decisión que termina con la obligatoriedad para los trabajadores de tener que afiliarse, cuando se inicia un vínculo de trabajo, a la obra social del sindicato correspondiente a la rama laboral en la que se desempeña.

Ambas decisiones fueron tomadas en medio de la tensión que existe entre el Gobierno y los sindicatos, una relación que quedó resquebrajada luego del paro nacional que la CGT llevó a cabo el 24 de enero pasado y que, día tras día, suma declaraciones de confrontación.

Fue el vocero presidencial Manuel Adorni quién, durante su habitual conferencia de prensa en Casa de Gobierno, anunció la pronta publicación en el Boletín Oficial de la reglamentación del 70/2023.

«Durante décadas esto no pudo ser así ya que muchos estaban obligados a mantener la obra social que les obligaba a tener la actividad o el sindicato al que pertenecían, así que esto les va a dar mucha más libertad», dijo el funcionario.

La reglamentación, aclaró, «busca terminar con la obligatoriedad de darte de alta en un empleo y quedar preso en la obra social que corresponda al sindicato que te nuclea», explicó, y afirmó que «el objetivo es darle libertad de elección a los beneficiarios e impulsar la libre competencia entre obras sociales y prepagas».

Desde el Gobierno aclararon, además, que los beneficiarios «podrán elegir una obra social o prepaga sin ningún tipo de intermediación» y que «podrán ejercer el derecho de libre elección una vez al año, en cualquier momento desde el inicio de la relación laboral».

El de los fondos de las obras sociales ha sido, a través de los años, un tema siempre sensible y desde hace algunos días en la Casa Rosada se venía anticipando que encararían ese conflictivo tema.

En la agenda entre las partes también se encuentra el irresuelto Consejo de Salario Mínimo y la convocatoria a paritarias docentes, punto que el Gobierno insiste en derivar a las autoridades provinciales.

Aunque se intentará insistir retóricamente en que son las jurisdicciones las que deben fijar los sueldos, también se entiende que «a nadie le conviene que las clases no se inicien», reconocieron este lunes fuentes de Balcarce 50.

Todas esos frentes se dan en un escenario en el que la CGT volvió a abrir la posibilidad de un nuevo paro general.

Por su parte, el cosecretario general de la CGT y líder del sindicato de los trabajadores de la Sanidad, Héctor Daer, consideró que «va madurando» en la central obrera la posibilidad de realizar una nueva medida de fuerza, en el marco de un «feroz aumento de la pobreza».

«Se va madurando por la propia actitud de ajuste que tiene el Gobierno», respondió Daer ante una consulta acerca de si la CGT evalúa llevar adelante una huelga, tal cual hizo el 24 de enero pasado a nivel nacional y por el lapso de 12 horas.

Hace tan sólo dos días, el otro cosecretario general, Pablo Moyano, pronosticó que marzo «será un mes muy conflictivo», dijo que «el interior del país es un polvorín» y confirmó las deliberaciones internas sobre la medida de fuerza.

«El Consejo de la CGT está autorizado para tomar las medidas necesarias, no vamos a poner fechas todavía, pero se está discutiendo el paro general», dijo

En una clara advertencia, Moyano advirtió a Milei que «se prepare» porque señaló que, desde la CGT, no serán «meros espectadores de cómo van a ir destruyendo el país y del avasallamiento a los trabajadores».

Mientras tanto, este miércoles el gremio ferroviario de La Fraternidad tendrá su propia medida de fuerza y su titular, Omar Maturano, consideró que la CGT debe convocar al paro.

«Tenemos que hacer un paro general por nosotros, pero también por los jubilados, por el trabajo, por la reforma laboral del DNU», explicó el dirigente de La Fraternidad en declaraciones a El Destape Radio.

Fuente: Télam